Me rio de la igualdad. No somos iguales, pero tampoco queremos serlo. Las diferencias nos enriquecen. Nos gusta ser de Marte y a ellos de Venus. Lo único que hemos perseguido es la libertad.
Nunca quisimos quemar el sujetador, menúda ordinariez ir marcando pezones, además de incómodo, que la gravedad, es la gravedad... Sólo luchábamos por cortar los yugos que nos encadenaban a la cocina, para salir de un hogar que a veces se convertía en prisión y desarrollar nuestra mente además de perpertuar la especie. Muchas nos abrieron el camino y lo consiguieron...
Ahora se debate sobre la prohibición del burka, pero nosotras hace unos años también lo llevábamos aunque parece que no nos acordamos y muchas lo siguen llevando en España, aunque sea un velo invisible. También se pactaban nuestros matrimonios, teníamos dote y pasábamos de nuestro padre a nuestro marido y no podíamos ni firmar un contrato de trabajo sin su permiso.
A veces se me olvida , que vivo en una gran ciudad, que tengo educación .. Entonces pienso que ya lo hemos conseguido, que ya somos libres... Porque en mi círculo la mujer sí lo es, aunque no estemos en los consejos de administración de las empresa y nuestras nóminas sean más bajas. Nosotras sí podemos elegir. Evitar cromañones con costumbre del pasado y rodearnos de hombres que nos miran de igual a igual, que nos admiran y no nos temen, que también planchan, hacen la compra y recogen a los niños del colegio y que no sólo nos ven como una barriga con patas que alberga niños...
Pero tenemos suerte. Aún no hemos conseguido liberar a todas las mujeres. Hace poco me comentaba un familiar que en un pueblecito de Extremadura dos niños de unos 10 años estában jugando y cuando terminaron toda la habitación estaba llena de cochecitos, piezas de lego y muñecos de plástico. Mi amiga les dijo "Venga a recoger la habitación" y uno de los niños le dijo al otro: "Deja eso, que recoger es de mujeres".
¿Qué?, ¿ recoger sigue siendo de mujeres? Imagino al padre de ese niño diciéndole después de cenar "déja eso, que lo recoja tu madre", "los niños no lloran"y bla, bla, bla. Y no es maldad, es tradición, falta de evolución, miedo e inseguridad derivadas de una educación basada en principios de otros tiempos, pero que sigue existiéndo en muchos lugares del mundo y también en España.
¿Cuántas mujeres llevan burka?, ¿Cuántas temen quitárselo?, ¿Cómo podemos ayudar a estas mujeres a quemar los burkas de occidente?
Muy buen post Rosa.
ResponderEliminarCreemos que tenemos mucha libertad y nos dedicamos a criticar la "no" libertad de otros (sin ánimo de comparar porque no tiene ni punto de comparación), cuando aquí mismo, aquí al lado, hay mujeres que siguen sufriendo por no verse reconocido su esfuerzo y trabajo.
No soy feminista ni pretendo serlo. No creo en la igual 100%; pero creo en la capacidad de la mujer para desarrollar trabajos igual de bien que los hombres y qué mínimo que este reconocido.
Felicidades una vez más por el post! :D
Pues gracias a esa corriente de análisis que es el feminismo hoy hay cosas que damos por normales que nuestras bisabuelas ni soñaron tener.
ResponderEliminarla igualdad y la paridad es una lucha constante. Siempre que reivindiques los derechos de las personas oprimidas y quieras un mundo con paridad y equidad serás feminista, aunque no te apetezca ¿o es que te has creído ese burka sexista de occidente que dice que las mujeres feministas odian a los hombres, son lesbianas y no f...?
Respecto al post. Hemos de luchar por hacer mejor nuestra sociedad, por supuesto pero es una falta de respeto para las mujeres subyugadas por leyes medievales considerar que lo de occidente son burkas
Muchas gracias a las dos por viestras opiniones...
ResponderEliminarAl final estamos todas en el mismo barco. El objetivo de este post era generar la reflexión y abrir el debate y he utilizado la metafora del burka sólo con el objetivo de pinchar y provocar, en ningún lugar de ofender, lo siento en cualquier caso hiere sensibilidades.
Logicamente persigo la libertad de todas las mujeres del mundo y si eso es ser feminista pués entonces lo soy. Hay que conquistar la libertad y no sólo de la mujer, también de los homosexuales y otras minorías... En definitiva de cualquier persona que esté oprimida por una sociedad en la que imperen valores y tradiciones ancladas en el pasado y que hagan sufrir a la gente limitando sus libertades...
Por supuesto la mujer árabe tiene una gran revolución pendiente y el burka es un elemento opresor y hay que acabar con él. Pero en occidente también tenemos mucho por hacer, no es lo mismo una gran ciudad que un pueblo recondito... Me sorprende que haya lugares donde "regojer sea cosa de mujeres". El cambio vendrá por nosotros y por la educación y creo que algún día lo conseguiremos. ¿Cuál pensais que es el camino?
Por desgracia, el problema del cubrimiento del cuerpo, en parte o en su totalidad, en la religión islámica es un tema religioso/cultural muy complejo.
ResponderEliminarHemos de darnos cuenta que el machismo como lo entendemos en occidente, proviene de un sustrato cultural judeocristiano, y como tal, la lucha contra él se ha producido en el contexto que ese mismo marco delimita.
Creo que el problema de la mujer en culturas que no tienen una base judeocristiana, se ha de enfocar desde otra óptica, menos subjetiva, y más pragmática, fuera de toda contaminación moral. Es una opinión.
¿Qué opináis al respecto?
@JotaBenedi
Muchas gracias por tu comentario Jorge, entiendo perfectamente lo que quieres decir... Hay que mirar cada realidad en su contexto y cambiarla desde dentro desde su propio ámbito cultural. Habría que medir cada realidad por su rasero correspondiente. Y los cambios tienen que venir desde dentro, aunque a veces la contaminación moral es dificil de eliminar...
ResponderEliminarPara mi el límite son los derechos humanos y de libertades individuales... Temas tan terribles como la ablación o el apedreamiento habría que prohibirlos radicalmente...
Lo que yo siempre digo es que la cultura judeocristinana también cometió muchas barbaridades (la inquisición por ejemplo, las cruzadas...) y contaminó la sociedad con tradicciones machistas. Hemos evolucionado y la cultura árabe también lo hará, aunque tienen que comenzar ellos mismos su revolución...