domingo, 16 de diciembre de 2012

Navidad sin estrella

-->
-->
Se te atraganta el turrón. Hay cosas que no vuelven.
Sí lo hace el olor a castaña asada, las colas frente a La Manolita y los Ferrero Rocher.
La culpa. La ciudad con traje de luces y la Plaza Mayor con pelucas.
Y tú quieres volver.
A no poder dormir la noche antes de Reyes,
cantar villancicos sin vergüenza a pedir el aguinaldo
o comer mazapán sin preocuparte del michelín.
Poner la estrella en el árbol, sin altura capaz de frenarte.
Volver.
 Al menos, llenar otra vez la casa de elfos.
Porque tienes que ser feliz.
Lo dice el Corte inglés, el calvo de la lotería y las burbujitas de Freixenet.
Todos te lo gritan al unísono; 
y si no, vendrán tres fantasmas para recordártelo.
Lo sabes. En todas las mesas hay huecos y relojes que no dan los cuartos.
Pero James Stewart sigue en tu televisor y Macaulay Culkin se queda solo en casa.
Ignoran que Belén Esteban quizá dé las campanadas este año,
que Papá Noel toma antidepresivos  y  que recortarán los caramelos en la cabalgata.
Que los reyes hacen huelga y no traen carbón a los malos.
Y que has perdido la estrella, pero tienes tarjeta de crédito. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario