Consciencia

Has abierto los ojos en medio del tsunami. Ahora temes que sea imposible cambiar de rumbo y te preguntas como te has dejado arrastrar tanto… Nada más fuerte, agárrate a mi mano ¿lo ves?

Despierta

Te advierto que no hay mayor jaula que un “¿y si..?

¿Te atreves?

Sedimento

Vi un fósil de un pez que se comía otro. Sin darse cuenta, acabaron así. Nosotros tampoco notamos nada, a veces. Desconocemos quien se está comiendo a quien. Inmóviles, inevitable sedimento.

Manos conscientes

— ¿Qué harás con las manos en el primer beso? 

Mis dedos cuentan 

los momentos que se perdieron    

las falanges sonámbulas. 

— Buena pregunta. 

Luego el cosquilleo 

de unas manos 

que despiertan

y se abren.

Voltaje

Te amé con el voltaje 

del pájaro que busca aliento 

en un cable de alta tensión. 

Retrovisor

Tu retrovisor

Dejar atrás sin soltar 

Continuar siendo.  

Palabrario: fugaz

Fugaz: brillo en estado puro que nos deja con ganas de más.   

Profecías

Hace 20 años escribí un cuento de una mujer que 20 años después se despertaba en la casa de una extraña. 

Moraleja: si no tomas el control, tus distopías se convierten en profecías.

Despierta.

Contra uno mismo

Entre escombros se pregunta si tirar piedras sobre su tejado le habrá llevado a derribar su propia casa. No.  Por supuesto la culpa es del otro y lanza otra piedra, una y otra vez, hasta sepultarse. 

Amores boreales

Aunque ya no queda ni rastro de nuestra estela, gravitan a lo lejos los restos de nuestro eclipse.  Confieso que en las noches oscuras juego a hacer con ellos auroras boreales. 

Llave

Aunque sean sublimes, ¿de qué te sirve aprehender las vistas desde una jaula

con la llave ardiendo en esas manos que dudan?

Tener el mundo a tu alcance y no atreverse

Terrible la cerradura de la mente:

Vivir a medias. 

A volar

Nacer mariposa da vértigo. Más cuando te obligan a crecer en la tierra para labrar tu propia crisálida. Casi olvidas tus alas. Entonces un poema, una caricia o la muerte. Agitas las alas. No hay marcha atrás. A volar.

Tanto o tonta, tanto o tonto

No sé si te quise tanto

tonta te quise, no sé

sé que a ti te quise tonto

¿Tanto te quise? No sé.

Ese aforismo que sí tienes

Este aforismo mío que ha nacido de eliminar de mi tiempo ese “no tengo” y que ocupa lo mismo que perderlo. ¡Ay ese aforismo, beso o intención! 

Tú

Nunca se trató de él 

o de ella

sino de ti.

Nadie se reduce a la mitad de nada.

Si no eran ellos o ellas... eres tú 

Y tu versión de ese amor. 

Pasión nuclear

 ¿A quien no le gusta estallar de vez en cuando para romper el tedio en pedazos? Lo que no pudo imaginar era como la radioactividad arrasaría con todo tras esa pasión efímera, sí, pero también nuclear. 

Metáforas

Soñé que Justo antes de que un tsunami impactara sobre mi ventana, en pleno fin del mundo, te confesaba vía whassap que te quería. Ya ves, no podría haber inventado mejor metáfora para nuestro amor. 

Cuéntame otra vez

Acarició la portada y tus paginas se estremecieron. Déjame que me cuente otra vez, desde el principio.  Y te leyó, tal y como necesitabas, como nadie jamas te había leído. Una nueva historia. 

Tu elemento

Por mucho que trates de confinarte, es imposible hacer cuarentena de uno mismo. 

No existe vacuna efectiva contra la pasión (afortunadamente) 

Pensarte a lo bonzo

—¿Volverías a incendiarte conmigo aún sabiendo lo que duelen los injertos de piel? 

— Sí— Y te enciendes. Yo salgo corriendo, eso sí: a lo bonzo.

Black jack

Te plantaste en 20- que no está mal, pensaste- y nos dejaste, sin saberlo, con el as clavado en el corazón. 

Inspiración Tolteki

Peldaño a peldaño, vas ascendiendo, cada vez más alto, más solo, hasta que, casi translúcido de ti mismo, de pronto una luz: La pregunta: ¿para qué esté empeño autómata de  llegar a la cima de ese espejismo del éxito que puede llevarte a la extinción? 

Siente.